imagine: abril 2010

No sé si el tiempo es propio de nuestra conciencia,

no se si existe de verdad,

no sé quien pueda comprobar si todo es una foto,

o va al ritmo de un tic-tac.

Pero ¿Qué diferencia hay? si de la conciencia

no nos podemos librar.

Esa guía innata y leal que vos bien sabes

no siempre podemos respetar, no siempre podemos.

Y hoy debe ser la tuya mi peor enemiga

la que te echa culpa

por no saber aguantar tus ganas

y las mias de parpadear una vez más.

Vos no te preocupes

yo voy a intentar

que pegue media vuelta y patee para atrás.

Leí algo sobre alguien a quien amar, pero si yo tengo a quien amar, pero no sé si lo amo o no.
Pero si yo lo amo, y él no me ama; ¿Cómo hacer te ame?. Es algo imposible, es obligarlo, es como si a un chico que no le gusta el tomate, decirle que lo coma, desde algún punto lo estas obligando a comerlo. O cuando le decis a alguien que te levante algo de piso y no quiere hacerlo, no podés obligarlo a levantarlo. Al caso es lo mismo, uno no puede obligar a la otra persona a amar, amar es algo único, indiscutible, es exepcional, entonces no se puede obligar a amar. ¿Por qué?Porque hay que sentirlo no hacerlo.

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jueves, 29 de abril de 2010